Estas semanas de frenéticas noticias, de no sé cuántos días históricos y de acontecimientos que todos los vemos, según el caso, sorprendentes, desesperanzadores , indignantes, inadecuados, impropios, injustos, ignominiosos, desmerecedores, humillantes, ruines, perversos, inmorales, degradantes, vergonzosos, oprobiosos, innobles, indeseables, infames, pérfidos, irritantes, confusos, dañinos, viles, enojosos, exasperantes, encolerizantes, excitantes y podéis seguir adjetivando… me han abstraído de escribir unas líneas en mi blog, no será una gran pérdida ya que creo que me lee muy poca gente, he intentado emplearme un poco más a fondo en otros medios que tienen algo más de difusión que éste , mi cajón más personal. Me gustaría focalizarme en un hecho reiterativo que creo que nos está pasando y preocupando a unos cuantos , la censura y la auto-censura . Me explico, a tenor de las opiniones de cada uno, a fuer de ser múltiples como no...